Enlace: https://elpais.com/deportes/2020-03-08/ella-gana-el-torneo-pero-no-el-honor.html Cuando llegas al final de un torneo, donde no ha habido una diferencia de género a lo largo de las competiciones y tu premio tiene el apellido Femenino, es como poco ridículo. Si se quería dar esa diferencia entre premio femenino y masculino de ajedrez, cosa un tanto absurda, llevaría a no competir a las personas de diferente género. Pero si se compite entre personas de diferente género y al final se discrimina el premio por género, significa que algo falla. Cuando una persona queda número uno en una competición, ha superado a todos los rivales y se ha ganado el reconocimiento de ser la persona que mejor lo ha hecho en la prueba. Si al finalizar la prueba, se cambian las reglas de juego y se da un premio por género, se está discriminando por razón de género. Este tipo de hechos, son los que sirven de ejemplo para ver la necesidad de educar en igualdad. Porque si bien existen cambios normativos...